LEANDRO demanda a sus vecinos CANDELARIA y EDUARDO a consecuencia de las molestias que le suponen los ejercicios de práctica de saxofón que, tres veces a la semana, lleva a cabo su hijo, menor de edad. Entre 2006 y 2010, la policía local realiza numerosas mediciones, entre las que hay 6 que superan holgadamente los decibelios establecidos en la Ordenanza municipal. Reclama una indemnización de 12.000 € en concepto de daño moral y que se condene a los demandados, a su elección, a que cese su hijo en la práctica doméstica del saxofón o insonoricen su vivienda.
1. Molestias excesivas; acción de cesación
Se consideran las mediciones prueba suficiente del carácter excesivo de las molestias [➜ Nociones, Tema 3, 2.5.C] y se estima la demanda en cuanto a la cesación [➜ Nociones, Tema 7, 2], en los términos solicitados.
2. Daño moral: prueba y cuantificación
En cuanto al daño moral [➜ Nociones, Tema 2, 5], pese a la ausencia de una prueba específica, se considera existente:
«…demostrada la realidad y persistencia de una inmisión de ruido por encima de los límites de obligada tolerancia, la certeza del daño moral sufrido por quien se ha visto compelido a soportarla no requiere una prueba adicional de las reacciones, sentimientos y sensaciones que han acompañado a su padecimiento»
La cuantía del daño moral, a la vista de los precedentes establecidos en casos análogos, se rebaja a la mitad de lo solicitado.
3. Jazz, saxos y vecinos
Charlie Parker, uno de los más grandes músicos de la historia del jazz, contaba en una entrevista que, cuando era adolescente, sus vecinos amenazaron a su madre con intentar expulsarla porque les volvía literalmente locos durante las 11 a 15 horas diarias que dedicaba a ensayar con su saxo alto. No me cabe la menor duda de que soportar durante esas horas a un Parker adolescente ensayando y ensayando puede atragantarse hasta al más entusiasta amante del jazz y de Charlie Parker. No sabemos cómo se solucionó el problema de Charlie Parker, pero está claro que no corresponde a los vecinos soportar la carga de los ensayos de todos los jóvenes saxofonistas para promover que alguno de ellos resulte un nuevo Charlie Parker. Las soluciones: insonorización de la vivienda, ensayo en locales adaptados o casas aisladas o, hoy en día, empleo de herramientas tecnológicas para apagar el sonido de los instrumentos musicales.
SAP BI 532/2010, de 7 de diciembre [ROJ: SAP BI 3203/2010]