LÁZARO es propietario de un mastín, perro que, de acuerdo con la normativa autonómica aplicable no tiene la condición de animal potencialmente peligroso. Desde el mallazo de hierro en el que se encuentra guardado el mastín, consigue apresar entre sus dientes a un perro de reducido tamaño que se había aproximado al cercado. MAXIMILIANO, para liberar al perro, se sube a una pilastra que se encuentra adosada al cercado e intenta separar a los dos animales con un palo. De forma inesperada y violenta, el mastín suelta la primera presa, muerde a MAXIMILIANO en un brazo de tal manera que le hace caer en el interior de la cerca y lo sigue mordiendo hasta que la intervención de una tercera persona logra liberarlo.
Es de aplicación el art. 1905 CCiv, que solo libera de responsabilidad al propietario de un animal si prueba la culpa exclusiva de la víctima (o la fuerza mayor) [Nociones, Tema 3, 3.1.B]; los hechos probados no revelan tal culpa [Nociones, Tema 6, 1].
ROJ: SAP BA 968/2015